Capítulo 4: Enlaces amorosos
Que desmadre hubo en la fiesta de anoche... Seila con Justin, Aitor con Lilly... y lo más impresionante de todo... ¡Yo con Brad! Ha sido despertarme... y ver a Brad tirado en la cama, ami lado, desnudo, y entonces me froto los ojos, por que no me lo puedo creer, y compruebo que no era ningún sueño... Entonces se despierta Brad y dulcemente, por detrás de mí, cosa que yo para nada me esperaba me susurra:
-Buenos días preciosa... ¿Has dormido bien?
Yo, con una gran sonrisa satisfactoria le contesto con mucha delicadeza:
-Si... y tanto que si... ¿Y tu?
El simplemente me asiente con la cabeza, y me besa. De repente oigo un móvil vibrar.
-¡ DIOS MÍO!
Brad, preocupado me pregunta:
-¿Que pasa?
Mi madre me había hecho 15 llamadas perdidas, y olvidé decirle que me quedaba en casa de Allison a dormir (oviamente era solo una escusa).
-Mi madre, no le he dicho nada, y debe de estar totalmente preocupada por mí. ¿Que le voy a decir ahora?
Brad ha pensado en que le diga que me quedé dormida viendo una película en su casa, una película que vimos solo los últimos invitados de la fiesta. Desde luego es lo mejor que puedo hacer, así que llego a casa y se lo explico todo:
-¿Mamá? ¿Estás en casa?
Mi madre pega un grito de alegría y viene hacia mi.
-¡Hija mía! ¡Estás bien!
Mi madre me besuquea toda la cara, pero se para un segundo, y reflexiona sobre la situación...
-¡¿CÓMO SE TE OCURRE?! ¡Ni siquiera me has avisado de que vendrías a el día siguiente!
-Lo se mamá... lo siento, lo olvidé... Es que me quedé dormida viendo una película... No volverá a ocurrir, te lo prometo.
Mi madre, después de aquella charla, me castiga durante un mes entero, que suponiendo como es ella, me lo rebajará a dos semanas o así. Un sábado estudiando todo el día sin salir de fiesta, para una adolescente es como... como una gorda a dieta en una tienda de chocolate valor.
-Chicos, papá y yo nos vamos a comer por ahí, portaros bien.
Mamá se va con papá por ahí... volverá por la tarde. Es mi oportunidad, llamaré a Allison y que se pase por casa un ratito, por que si salgo... volverán antes que yo.
Voy corriendo el salón, me siento en el sofá y marco el número para llamar a Allison, cuando se me acerca Aitor.
-¿Que haces Julia?
-Llamar a Allison, ¿Por que te importa?
Aitor, con una mirada de llévate cuidado me dice:
-Pues sería una lástima que Allison no pudiese verte hasta dentro de un mes... ¿no crees hermanita?
-No serás capaz de chivarte gusano... (gusano es como le llamo cuando me pone nerviosa o me hace algo malo o algo de eso).
-Prueba...
Increíble... Mi hermano lo esta consiguiendo, a ver que quiere:
-A ver gusano, ¿Que quieres?
-Quiero que hagas mis tareas de casa durante... hum... no se... 1 mes.
Me paro un momento y contesto:
-Dos semanas.
Aitor sigue insistiendo.
-Tres semanas.
Le negocio más hasta conseguir algo aceptable:
-Dos semanas y media o nada.
-Hum... de acuerdo.
Cuando al fin me deja en paz, llamo a Allison.
-Tía pásate por casa que necesito hablar con alguien.
-En seguida me paso. Yo tengo cosas que contarte... Jaja ¡Hasta ahora!
Allison está bastante emocionada, como si algo interesante hubiese pasado.
Ya son las cuatro de la tarde, y Allison llama a la puerta.
-¡Allison, pasa, corre!
Cuando llegamos a mi cuarto nos empezamos a bombardear con preguntas y con todo tipo de
cosas.
-Ayer pase la noche con Brad en su casa... y... bueno... digamos que surgieron cositas...
Allison, sorprendida, me mira con una gran sonrisa en la cara y me dice:
-Tía, eres la hostia...
Me río, y a continuación le pregunto:
- ¿Y tu que me querías decir?
Allison, con una mirada tímida, no para de sonreír.
-Anoche conocí a un chaval.
-¡DETALLES ALLISON, DETALLES!
¡Estoy eufórica por Allison!
Allison me cuenta todo con pelos y señales. Ese chico se llama Max, y estaba en la fiesta de Brad. Max es un chico no muy alto, moreno, y de pelo oscuro. Tengo ganas de conocerle, y saber quien es. Allison ha quedado con él el lunes después de el instituto, para comer, charlar, y conocerse más.
-Julia, ¿Quieres venir y le conoces?
-Vale, le diré a mi madre que como contigo, supongo que me dejará...
He aceptado, y supongo que mi madre me dejará, pero como le pille en un mal momento... en casa que me quedaré.
-Allison, ¿Cuantos años tiene Max?
Le pregunto a Allison por la edad de Max, ya que no lo sabía. Allison me confirma su edad:
-Tiene 17 años.
-¡Oh, que monoso! (a mi como siempre, todo me parece monoso).
Después de todo, Allison se ha tenido que ir.
Ya son las 6 de la tarde, y mis padres han vuelto a casa bastante cabreados. Como de costumbre, discuten por el tema de el dinero. Mi madre se ha empeñado en pedirse un plato de langosta, como caprichito de un día (supuesta mente), y mi padre, como siempre, no ha parado en toda la comida de decirle a mi madre que no hace más que gastar, gastar y gastar. Mi madre, que es tan cabezota como yo, se niega a darle la razón a mi padre, que si que la tiene, pero tampoco tiene que pasarse, creo yo. He decidido mejor estarme calladita y no hacerles comentarios por hoy.
Llega la noche, y tengo la cabeza como un bombo de tanto estudiar, así que me acuesto en la cama con el portátil y me pongo a escuchar música y a cotillear. No he podido evitar la intriga de buscar las escuelas de ballet que hay por aquí, y ver la que me mencionó Brad. La verdad es que tienen bastante nivel, y quisiera ir en persona para verlo mejor. He visto que este año están planeando hacer como una obra fusionada de los bailes más típicos y conocidos como ya son el lago de los cisnes, el cascanueces, Blanca nieves... El Lunes, después de ir a comer con Allison y Max, me pasaré por la escuela. Ya se verá lo que hago... Probablemente le pregunte a mi madre más adelante, cuando se le pase el enfado, si me podría apuntar.
-Chicos, papá y yo nos vamos a comer por ahí, portaros bien.
Mamá se va con papá por ahí... volverá por la tarde. Es mi oportunidad, llamaré a Allison y que se pase por casa un ratito, por que si salgo... volverán antes que yo.
Voy corriendo el salón, me siento en el sofá y marco el número para llamar a Allison, cuando se me acerca Aitor.
-¿Que haces Julia?
-Llamar a Allison, ¿Por que te importa?
Aitor, con una mirada de llévate cuidado me dice:
-Pues sería una lástima que Allison no pudiese verte hasta dentro de un mes... ¿no crees hermanita?
-No serás capaz de chivarte gusano... (gusano es como le llamo cuando me pone nerviosa o me hace algo malo o algo de eso).
-Prueba...
Increíble... Mi hermano lo esta consiguiendo, a ver que quiere:
-A ver gusano, ¿Que quieres?
-Quiero que hagas mis tareas de casa durante... hum... no se... 1 mes.
Me paro un momento y contesto:
-Dos semanas.
Aitor sigue insistiendo.
-Tres semanas.
Le negocio más hasta conseguir algo aceptable:
-Dos semanas y media o nada.
-Hum... de acuerdo.
Cuando al fin me deja en paz, llamo a Allison.
-Tía pásate por casa que necesito hablar con alguien.
-En seguida me paso. Yo tengo cosas que contarte... Jaja ¡Hasta ahora!
Allison está bastante emocionada, como si algo interesante hubiese pasado.
Ya son las cuatro de la tarde, y Allison llama a la puerta.
-¡Allison, pasa, corre!
Cuando llegamos a mi cuarto nos empezamos a bombardear con preguntas y con todo tipo de
cosas.
-Ayer pase la noche con Brad en su casa... y... bueno... digamos que surgieron cositas...
Allison, sorprendida, me mira con una gran sonrisa en la cara y me dice:
-Tía, eres la hostia...
Me río, y a continuación le pregunto:
- ¿Y tu que me querías decir?
Allison, con una mirada tímida, no para de sonreír.
-Anoche conocí a un chaval.
-¡DETALLES ALLISON, DETALLES!
¡Estoy eufórica por Allison!
Allison me cuenta todo con pelos y señales. Ese chico se llama Max, y estaba en la fiesta de Brad. Max es un chico no muy alto, moreno, y de pelo oscuro. Tengo ganas de conocerle, y saber quien es. Allison ha quedado con él el lunes después de el instituto, para comer, charlar, y conocerse más.
-Julia, ¿Quieres venir y le conoces?
-Vale, le diré a mi madre que como contigo, supongo que me dejará...
He aceptado, y supongo que mi madre me dejará, pero como le pille en un mal momento... en casa que me quedaré.
-Allison, ¿Cuantos años tiene Max?
Le pregunto a Allison por la edad de Max, ya que no lo sabía. Allison me confirma su edad:
-Tiene 17 años.
-¡Oh, que monoso! (a mi como siempre, todo me parece monoso).
Después de todo, Allison se ha tenido que ir.
Ya son las 6 de la tarde, y mis padres han vuelto a casa bastante cabreados. Como de costumbre, discuten por el tema de el dinero. Mi madre se ha empeñado en pedirse un plato de langosta, como caprichito de un día (supuesta mente), y mi padre, como siempre, no ha parado en toda la comida de decirle a mi madre que no hace más que gastar, gastar y gastar. Mi madre, que es tan cabezota como yo, se niega a darle la razón a mi padre, que si que la tiene, pero tampoco tiene que pasarse, creo yo. He decidido mejor estarme calladita y no hacerles comentarios por hoy.
Llega la noche, y tengo la cabeza como un bombo de tanto estudiar, así que me acuesto en la cama con el portátil y me pongo a escuchar música y a cotillear. No he podido evitar la intriga de buscar las escuelas de ballet que hay por aquí, y ver la que me mencionó Brad. La verdad es que tienen bastante nivel, y quisiera ir en persona para verlo mejor. He visto que este año están planeando hacer como una obra fusionada de los bailes más típicos y conocidos como ya son el lago de los cisnes, el cascanueces, Blanca nieves... El Lunes, después de ir a comer con Allison y Max, me pasaré por la escuela. Ya se verá lo que hago... Probablemente le pregunte a mi madre más adelante, cuando se le pase el enfado, si me podría apuntar.
Max (17 años)